Paradas, un descanso en el viaje

Paradas posee el encanto de los lugares de paso que incita al disfrute y al descanso. Ubicada entre las cuencas de los ríos Corbones y Guadaíra, la pequeña localidad, habitada desde los romanos, fue ganando en población e importancia tras su fundación como villa en el siglo XV y la llegada de nuevos pobladores provenientes de Castilla León.

Destacan la armonía y sencillez de sus monumentos, como la iglesia de San Eutropio, o la pequeña ermita de San Albino, actualmente espacio cultural, o los Jardines de Gregorio Marañón donde podemos sentarnos a la sombra para disfrutar de la tranquilidad de esta localidad. Animate a disfrutar del calor de su gente y la tranquilidad de sus calles.

En Paradas podemos encontrar una de las escasas dehesas supervivientes de la Campiña, el Alcornocal de la Mocheta, espacio singular donde podremos pasear entre hermosos ejemplares de alcornoques y pinos, aulagas y retamas.

Como elementos patrimoniales de interés merece la pena acercarse a la hermosa fuente de Paterna situada a unos seis kilómetros del pueblo, junto a la Vereda de Sevilla a Marchena, refrescarnos después en El Cañuelo, histórica fuente que abastecía al núcleo urbano, o pasar bajo el popular Puente del Birrete.